Labor lætitia nostra III

PIJO 'REPEINAO'

Desventajas de trabajar en un sector de hombres y ser la única mujer...
Éste, en concreto, es un caso especial... porque ha dejado de ser sólo algo laboral. Empezó con guiños y sonrisitas (por favor, que eso ya no se lleva...) y palabras amables que estaban de más.

Después de coincidir un día fuera de aquí, la cosa ya se fue de las manos. Se multiplicaron sus actos de conquista (frustrados) y empezó a tomarse confianzas que NO tenía. Empezó a preguntar a mis jefes por mí... y os podéis imaginar el cachondeíto.

Cierto día vino a cobrar por sus servicios y ésto (más o menos) fue lo que pasó:

- Hola... Vengo a verte a ti.
- Pues los negocios tienes que hacerlos con él -dije señalando a mi jefe.
- Ya... pero tú eres más agradable de ver.
- Pero no de tratar, ¿verdad? -y le di la espalda descaradamente.

Pensé que con ésto tendría suficiente para una temporada... pero me equivocaba. Días después volvió a aparecer justo cuando me iba a casa y empezó un interrogatorio sobre dónde iba, a qué y con quién, que ignoré completamente. Me despedí de mi jefe y de él no.

Desde ese día ha habido poco movimiento. Nos hemos cruzado por aquí, pero ni una palabra. ¿Huele a victoria? ¿Sabe a victoria? Lo dudo mucho. Volverá. Y estaré aquí para contarlo.